Durante la limpieza general de la casa, también vale la pena limpiar las juntas del suelo. Estas juntas tienden a acumular todo tipo de suciedad. Con el tiempo, simplemente se oscurecen, lo que las hace muy antiestéticas. Afortunadamente, existe un ingenioso truco para limpiar las juntas del suelo. Se necesitan dos ingredientes comunes que la mayoría de nosotros tenemos en el armario de la cocina.
¿Por qué se oscurecen las juntas del suelo?
Las juntas del suelo son lugares muy propensos a la acumulación de suciedad. Nos referimos principalmente a las juntas del baño o la cocina. La humedad, el polvo, la suciedad de los detergentes o los restos de comida se acumulan fácilmente en las juntas, especialmente cuando subestimamos su estado y rara vez nos ocupamos de limpiarlas.
Con el paso del tiempo, las juntas del suelo absorben la suciedad y se oscurecen, lo que es una señal de que es hora de limpiarlas a fondo. Para empeorar las cosas, en estos lugares a menudo podemos observar manchas negras, grises o verdosas que indican la aparición de moho. Suelen aparecer en baños con poca ventilación, donde hay mucha humedad.
Un ingenioso truco para limpiar las juntas del suelo
Existe un ingenioso truco que te ayudará a limpiar las juntas del suelo. Solo tienes que utilizar dos productos muy comunes que probablemente todos tengamos en el armario de la cocina. Se trata del ácido cítrico y el bicarbonato sódico.
El ácido cítrico ayuda a eliminar los depósitos de cal. Por su parte, el bicarbonato de sodio es eficaz contra las manchas de grasa. Con estos ingredientes hay que preparar una pasta limpiadora, ideal para las juntas del suelo.
El ácido cítrico debe mezclarse con bicarbonato sódico en proporciones de 1:2 (1 parte de ácido por 2 partes de bicarbonato). A continuación, vierte poco a poco agua en la mezcla preparada hasta que adquiera una consistencia similar a la de un gelatina. Aplica la pasta sobre las juntas con un cepillo (puedes utilizar un cepillo de dientes viejo que ya no uses). Dejamos actuar el preparado durante unos 10-15 minutos, después frotamos con un cepillo y aclaramos con agua tibia. ¡Las juntas quedarán como nuevas!
Atención: antes de cubrir las juntas, es recomendable probar el producto en unas juntas que se encuentren en una parte invisible del suelo. Esto se debe a que el ácido cítrico puede dañar los materiales de piedra natural. Si tenemos suelos fabricados con este tipo de material, es mejor utilizar productos específicos para este tipo de materiales.
Otros métodos tradicionales para eliminar la suciedad de las juntas
Además del método descrito anteriormente, también existen otros métodos tradicionales que pueden ayudar a eliminar la suciedad de las juntas. El más sencillo consiste en utilizar agua mezclada con jabón o líquido lavavajillas. Este tipo de mezcla debería funcionar con la mayoría de la suciedad, aunque puede resultar insuficiente en el caso de manchas más persistentes.
El vinagre común también ayuda a eliminar los depósitos de cal de las juntas. Antes de usarlo, hay que mezclarlo con agua en proporciones 1:1. Al igual que con el truco mencionado anteriormente, antes de cubrir todas las juntas, es mejor probar el producto en una parte invisible.
Las manchas difíciles de eliminar pueden requerir el uso de productos químicos. Sin embargo, antes es recomendable probar métodos caseros, que suelen ser más económicos.
